24 Aug
24Aug

Queridos hermanos en nuestro Señor Jesucristo, en el mundo estamos expuestos a diferentes doctrinas, múltiple información, diversidad de usos y costumbres, por lo cual, es necesario saber exactamente que somos y cuál es el fin de nuestra existencia, para poder obrar en consecuencia.

"El hombre es criado para alabar, hacer reverencia y servir a Dios nuestro Señor y, mediante esto, salvar su alma." San Ignacio de Loyola, ejercicios espirituales. 

Nuestro Señor Jesucristo, Dios y hombre verdadero, nos reveló la doctrina que debemos creer, la fe que nos conduce a la bienaventuranza eterna, los mandamientos que debemos guardar, estableció la santa Iglesia Católica para que continúe su labor salvadora hasta la consumación de los tiempos, proporcionándonos los medios de salvación, sobre todo en los Sacramentos y en el cuerpo de doctrina. 

Una vez definido el fin de nuestra vida, debemos trabajar en nuestra salvación eterna, apartarnos de lo que nos aparta de Dios y de su sagrada revelación, estudiar nuestras debilidades para fortalecernos con la virtud que más hemos menester, conocer nuestros dones y talentos para acrecentarlos, buscando en todo la mayor honra y gloria de Dios nuestro Señor. 

"Luego mi fin no son precisamente las riquezas, los honores, las delicias; representar un papel brillante, lucir, gozar, sino principalmente y ante todo servir a Dios; y servirle, no a mi antojo y capricho, sino como Él quiere que le sirva." San Ignacio de Loyola, ejercicios espirituales. 

"Sano o enfermo, rico o pobre, sabio o ignorante, honrado o despreciado, con éste o con aquél genio, con muchos o pocos dotes, aptitudes y talentos, puedo alabar, hacer reverencia y servir a Dios." San Ignacio de Loyola, ejercicios espirituales. 

Es fundamental para nuestro bien eterno y temporal meditar estas palabras de San Ignacio de Loyola, para aprender a vivir, desarrollarnos, crecer en los fundamentos de nuestra vida católica. 

¿Cómo usar de las cosas del mundo, si no sabemos lo que somos?, ¿cómo entender el éxito en la vida, si desconocemos el fin de nuestra estadía en la tierra?... Es fundamental comprender lo que somos y para lo que hemos sido creados, es base del crecimiento, fundamento del desarrollo, con lo cual tenemos una cosmovisión cristiana, y una comprensión de los sucesos que se desarrollen en nuestra vida. 

"Las cosas de éste mundo fueron dadas al hombre para que le ayuden a conseguir su fin, que de ellas tanto debemos usar cuanto sirven al fin, y tanto dejar o quitar cuanto nos impiden." San Ignacio de Loyola, ejercicios espirituales. 

Destinemos un tiempo cada día a la meditación de las verdades eternas, al estudio de la doctrina católica; procuremos frecuentar los Sacramentos, tener devoción a la Madre de Dios, implorar la misericordia de nuestro Redentor con el rezo del santo Rosario. 

Roguemos a la augusta Madre de Dios, nos conceda las gracias necesarias, mueva nuestra voluntad y entendimiento a vivir católicamente, de tal manera que nos realicemos en la presente vida y alcancemos las moradas eternas en compañía de los bienaventurados. 


Dios te bendiga.


 

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.